martes, 29 de julio de 2008

¡Extra, María Antonieta guillotinada!

Me entero por la bitácora del gran Chiqui (¡Gracias pero, ¿Por qué me has quitado de la lista de tus amigos?) que The Times ha abierto de forma gratuita -será durante un tiempo y hay que registrarse- su hemeroteca en internet. Ríase usted de los 32 años de historia que tiene EL PAíS, e incluso de los ciento y pico de ABC o de La Vanguardia. El archivo de The Times se remonta a hace más de 200 años. Resulta curiosísimo leer cómo se publicó, el 23 de octubre de 1793 la noticia de la muerte en la guillotina de María Antonieta. Y muy interesante leer acontecimientos como éste no como hechos históricos, sino como noticias, frescas, casi salidas del horno. Dense un paseo y me cuentan.

(Algunos acontecimientos que se pueden visitar sin registrarse, creo que están puestos como ejemplos, son: la batalla de Waterloo, el asesinato de Lincoln, los crímenes de Jack el Destripador, el crack del 29, o el discurso de Churchill de "lucharemos en las playas...").

jueves, 24 de julio de 2008

¿La vergüenza de Italia?


En estos días una noticia ha saltado a muchos -no todos- medios nacionales e internacionales: dos niñas gitanas se han ahogado en una playa cerca de Nápoles ante la indiferencia de los bañistas. La prueba irrefutable de este hecho es una foto, que también ha dado la vuelta al mundo, y que muestra a dos veraneantes tomando el sol a corta distancia de donde yacen los cadáveres de las fallecidas.

La mayoría de los medios se han tragado, sin más, lo que traían los teletipos de las agencias -estupor, indignación, polémica- aunque luego en la mayoría de las informaciones el único nombre propio que se citaba en ellas era el del arzobispo de Nápoles. La historia no tiene fisuras: en Italia tienen un gran problema con los gitanos, a dos niñas se las traga el mar, y los bañistas siguen tomando el sol mientras se recuperan los cadáveres. Al día siguiente, en el entierro, una de las abuelas, destrozada por la tragedia, remata: "Es que nos odian". Y para prueba de toda esta historia, redonda y generadora de miles de pinchazos en las páginas webs, la terrible foto.

Lo cierto es que una foto puede decir mucho, puede decir muy poco o puede decir lo contrario de lo que parece. Este vídeo, difundido por la prensa italiana, debió tomarse al mismo tiempo aproximadamente que la imagen. Pero da una perspectiva totalmente distinta de la situación. Para empezar en la playa hay un centenar de bañistas y de ellos 98 están de pie, inquietos, hablando con las autoridades. Al fondo, pero mucho más al fondo de donde sugiere la foto, hay efectivamente dos personas sentadas que siguen tomando el sol.

O sea que la imagen refleja una realidad muy parcial de lo que sucedía. Varios bañistas intentaron sin éxito salvar a las pequeñas. Luego, efectivamente, la playa volvió a la normalidad, aunque los cadáveres seguían allí, cubiertos bajo el sol. Pero ¿Han estado alguna vez en una playa dónde ha habido un ahogado o a alguien le ha dado un infarto? Les garantizo que pasado un rato de consternación la gente vuelve a sus quehaceres igual que sigue su vida normal diez minutos después de ver un accidente por la calle. ¿Revela eso algún tipo de odio o desprecio al ahogado o al atropellado? No, pero oiga, no me destroce la historia, que es demasiado bonita para que la arruinemos, las niñas son gitanas, los italianos odian a los gitanos...

Al margen de que el Gobierno de Berlusconi sea absolutamente indecente en sus medidas, que lo es, esta historia me parece sacada de madre. Y coinciden conmigo muchos internautas porque repasando los comentarios que han dejado en La Repubblica, La Vanguardia o 20 minutos resulta que al final es más polémica la difusión de la noticia tal y como la han dado los medios, que la supuesta indiferencia de los bañistas. ¿Son más listos los lectores que los periodistas? ¿O será que ellos no tienen que conseguir audiencia?

PS (añadido un día después): Hoy he leído unas declaraciones del fotógrafo en France 24h, rebotadas por Le Figaro digital. Dice que tomó la foto con gran angular para imitar otras sacadas con el tsunami pero que parte de los bañistas estaban ayudando al rescate como lo habrían hecho si se tratara de niñas italianas. Y que no entiende la polémica. ¿Da algún medio más esta información?

lunes, 21 de julio de 2008

Ajedrez retrospectivo

¿Le da el verano ese tiempo libre que no ha tenido en todo el año? Pues dese un gusto al cerebro y aficiónese a los problemas de ajedrez. Aunque no sea un gran experto en ese juego, no importa. Los hay de todos los niveles. En unos hay que buscar una estrategia ganadora. También los hay en que hay que buscar una táctica perdedora, y que harán las delicias de algunos que van de malditos por la vida. Los de ajedrez retrospectivo, como éste que incluyo y que puede resolverse con conocimientos básicos del juego, son en realidad una variante de esos problemas de lógica que tanto alabamos en puesfijate.

Mi abuelo materno era un gran aficionado a los acertijos en general y al ajedrez en particular y les aseguro que le aportaron muchísimos ratos estupendos en la vida. La excusa de "es que me aburre pensar", no vale. Es una cuestión de vagancia y merece la pena vencerla porque hay mucha felicidad en juego. Primero propóngase dedicar unos minutos a estos problemillas y escoja uno adecuado a sus conocimientos, de ajedrez, de lógica, de matemática recreativa -todos están muy emparentados- o de lo que sea. Luego escrútelo durante un rato. Si se aburre antes de encontrar la solución, apárquelo. Pero al cabo de unas horas o al dia siguiente, cuando se note con ganas, vuelva a repasarlo. Es posible que de tanto estudiarlo, se lo aprenda uno de memoria. Y eso es lo ideal, porque podrá reproducirlo en su mente en esos tiempos muertos en los que uno no sabe que hacer: cuando espera un autobús, antes de dormir etc

Al cabo de unos minutos, de unas horas o de unos dias, el problema se resolverá en su cabeza. Habrá oxigenado sus neuronas y sentirá una maravillosa sensación de victoria. Para no repetir lo del orgasmo mental usaré dos metáforas sin connotaciones sexuales: usted se sentirá aún mejor que cuando lográ al final sacarse el agua que le ha entrado por el oído en la piscina. Mejor aún: más satisfecho que cuando consigue quitarse ese trozo de filete que se le quedó entre los dientes. Entonces seguramente le picará el gusanillo y buscará otro dilema para resolver. Porque esto es como una droga, pero de las buenas.

PS: Ah, la solución del problema de lógica del otro día. No la he dado hasta ahora porque sabía que iba a ser publicada en ELPAÍS.com y no era cuestión de chafársela a los lectores. Uno, dos, cuatro, cinco, ocho, mil... miluno. Son los números, de mayor a menor y en castellano, que no tienen la letra e. Como ves, Heavy, no ibas desencaminado. Y no hacía falta saber matemáticas para sacarlo...

miércoles, 16 de julio de 2008

La resurrección del 'poilu'

Hace un año hablábamos aquí del desfile del 14 de julio en Francia, en el que echamos de menos a los poilus. Los poilus, literalmente, los peludos, es como llaman en el país vecino a los veteranos de la I Guerra Mundial. El motivo de su ausencia era evidente: en ese momento sólo quedaban dos con vida y ambos superaban los 108 años. Los dos han muerto en los últimos meses, la noticia del fallecimiento de Lazare Ponticelli, el último superviviente, saltó a las portadas de todos los medios del mundo porque se le despidió con honores de Estado.

Sentí mucho ambas muertes. Sobre todo la de Ponticelli, a quien intenté entrevistar infructuosamente en sus últimos meses de vida. Cuando recibí la noticia de su muerte estaba a la espera de una respuesta de su hija, que también debe ser viejísima. Así que pensé que me quedaría sin conocer al último veterano francés de la Grand Guerre. Cada uno tiene sus ilusiones y esa, fijense, era una de las mías.

Pero hace unos días me enteré de que entre los milagros que ha obrado -y sigue obrando, aunque haya terminado- la primavera de este año, está la resurección de un poilu. Un investigador ha encontrado a un combatiente vivo de aquella contienda. Se llama Fernand Goux, tiene 108 años y está jubilado como agricultor en Île de France. No constaba como veterano por el Ejército francés porque no llegó a los tres meses de servicio. Pero el poco tiempo que estuvo chupó la primera línea de frente y le tocó la grata misión de enterrar cadáveres.

Creo que el tipo está bien aunque no tiene ni puñeteras ganas de que le entrevisten. No sé si lo haré, pero al menos recupero la ilusión de conocer algún día, y tendrá que ser muy pronto, a un veterano de las trincheras. Puesfijate les mantendrá informados.

viernes, 11 de julio de 2008

Llega el SiPhone

Mucho ruido ha habido con la llegada del nuevo iPhone. En los medios hemos tenido un debate sobre cómo dar la noticia. La llegada de este nuevo cacharro es un acontecimiento mundial. Pero tampoco es cuestión de hacerle publicidad gratuita. Ante la duda hemos seguido la recomendación de un periodista que conocí hace diez años y que, quizá por seguir esa consigna, ahora es director de un importante medio de este país: hacer periodismo. Dar a la noticia la relevancia que merece (mucha) pero con todo el espíritu crítico que define a esta profesión.

Yo no me lo voy a comprar. Pero seguro que sí voy a adquirir este otro prodigio de la ingeniera moderna, el SiPhone que ha diseñado mi gran amigo Carlos Gámez. Estoy en ascuas esperando al 7 de agosto.

miércoles, 9 de julio de 2008

Uno, dos, cuatro, cinco, ocho...

A Puesfijate le gustan las matemáticas, ya hemos hablado de ello otros días. Son una ciencia preciosa y su vertiente recreativa me ha proporcionado algunos momentos extremadamente felices. Pues bien, aunque todos sabemos que hace una semana concluyó la Eurocopa en Austria y Suiza y que dentro de un mes arrancan los Juegos Olímpicos en Pekín, pocos saben que en unos días se disputan en Madrid, y por primera vez en España, la Olimpiada Matemática Internacional. Un certamen anual que enfrenta a algunos de los más jóvenes y brillantes cerebros del mundo. Estaremos atentos. De momento constato que los organizadores han caído en un error muy extendido: Olimpiada no era para los griegos el nombre de la competición, de los juegos, sino justamente los cuatro años que pasaban entre unos y otros. Qué le vamos a hacer, son de ciencias... :-)

Le propongo un juego. El pasado jueves cayó en mis manos un problema de matemáticas, o casi mejor, de lógica. Aparentemente no era muy complicado pero no lo resolví hasta el domingo por la noche. Cuatro días después. Naturalmente, no he empleado todo el tiempo en intentar solucionarlo. Sólo los ratos libres, cuando uno se aburre, cuando te metes a la cama y no sabe en qué pensar, cuando se acaba el periódico que uno va leyendo en el metro. Y es que estos problemillas tienen la virtud de entretener cualquier rato libre. Además, oxigenan la mente y proporcionan un pequeño orgasmo mental cuando los solucionamos.

Para solucionar el problema daré una pista. Los muy valientes pueden intentar resolverlo sin leerla. Advierto que yo la sabía desde el principio. Problema: ¿Qué número sigue a la serie siguiente? Uno, dos, cuatro, cinco, ocho, mil. Pista: (¡No siga leyendo si no quiere enterarse, aunque es mejor saberla porque si no es muy difícil!): los números están escritos en castellano. Espero sus respuestas, en unos días doy la solución.

lunes, 7 de julio de 2008

¡Adiós, guiñoles!

El viernes nos enterábamos de una triste noticia. La desaparición de los Guiñoles de la televisión. Después de 13 años de humor delirante, convertidos durante una década en emblema de una cadena, relegados en los últimos tiempos a un horario bastante absurdo, se va de la tele uno de los pocos programas que sorprendían por su ingenio. Un espacio que ha logrado dos milagros: uno, caricaturizar de maravilla a personajes de la vida pública; dos, conseguir que esos personajes se parecieran luego, cada vez más, a sus muñecos de látex.

No entiendo las estrategias de las grandes cadenas. Aclaro de antemano que tengo vínculos afectivos con algunas de las personas que trabajaban para el programa pero expreso, creo, el sentimiento mayoritario de los televidentes: es una pena. Y les dejo con su último gag o al menos el último que Cuatro ha subido a Youtube. Gracias por todo.

miércoles, 2 de julio de 2008

Solo ante el peligro

Hasta hace unos minutos tenía la suerte de no haber visto nunca Solo ante el peligro. Ahora tengo la suerte de haberla visto. Me imagino que casi todos saben de qué va la peli. Un sheriff (Gary Cooper) es abandonado por todos, incluso por su mujer (Grace Kelly) el día de su boda ante la llegada de un grupo de malotes que han prometido acabar con él. No voy a hacer crítica de cine, por que no se me da. Sólo que los motivos para abandonar a un hombre en esas circunstancias son muchos -el principal, miedo, pero también orgullo, envidia e incluso un discutible rechazo a todo tipo de violencia- y todos están estupendamente bien pintados en la película.

Cuando terminó, como hago siempre que algo me gusta, sea un libro, una película o una chica, me lancé a Internet para recabar toda la información posible sobre el objeto apreciado. Primero me informé de cómo se llamaba la actriz hispana que me recordaba a una amiga de CNN y que resultó ser Katy Jurado, la primera mexicana en ganar un Globo de Oro, precisamente por ese papel. Y luego me enteré de algo muy interesante. Lo siento si lo saben y soy el último en enterarme.

Resulta que Solo ante el peligro (High Noon, en inglés) ha sido un símbolo de la lucha contra algunas de las peores caras del capitalismo y el comunismo. Durante el rodaje de la película, en 1951, su guionista, Carl Foreman, tuvo que declarar ante los tribunales de Actividades Antiamericanas y se negó a dar nombres de supuestos enemigos de la patria. El propio Foreman reconoció que el filme es una alegoría de su situación personal, así que no podía arrugarse y ser menos que el sheriff Will Kane. Después John Wayne o Howard Hawks criticaron la película, supuestamente porque un vaquero nunca pediría ayuda y como revancha rodaron Río bravo. Pero, ironias del destino, el propio Wayne tuvo que entregarle el Oscar al mejor actor a Cooper.

30 años después, al otro lado del Telón de Acero, Solo ante al peligro se convirtió en símbolo de otra lucha. La del sindicato Solidaridad contra los soviéticos. Los de Walesa usaron el cartel de la película para presentarse a las elecciones democráticas de 1980 (véase la foto). Los rusos se rieron suponiendo que el pueblo polaco reaccionaría contra un icono tan remoto como un cowboy pero se equivocaron. Si no la han visto, véanla. Y si son culos inquietos como yo no se preocupen. Sólo dura 85 minutos, exactamente lo mismo que la acción en tiempo real. Se les hará cortísima.

martes, 1 de julio de 2008

...Puesfijate que pudimos

Dice hoy Almudena Grandes en EL PAÍS una frase que no comparto, o quizá no he entiendo, pero que me ha emocionado por la parte que me toca: "Los españoles jóvenes, morenos y bajitos siempre han sido los únicos capaces de asombrar al mundo". Pues bueno, cada día un poco menos joven pero -tres de tres- me identifico con ese prototipo. Aunque aún no he asombrado a casi nadie.

Como he dejado entrever cada día en este blog, he vivido con mucha intensidad esta Eurocopa, que me ha hecho tan feliz al menos por dos razones, sentimental y económica. Y me ha servido para reflexionar sobre el patriotismo, que hemos destilado a raudales estos días. Yo creo que el mundo sería mejor si todos perteneciéramos a una sola nación, la raza humana e incluso, por qué no, la de los grandes simios o la de la fraternidad animal. Pero eso tampoco me parece motivo para renegar del lugar en que hemos nacido, por suerte por desgracia, y cierto pique entre unos y otros, aunque sea por el insignificante motivo de haber nacido aquí o allí me parece sano. Además, de alguna manera hay que dividirse para disputar estas competiciones deportivas: sería mucho peor que se jugaran los mundiales por razas, profesiones o clases sociales y muy aburrido que fuera, por ejemplo, por la inicial de los apellidos.

¿Orgulloso de ser español? Sí, en la medida en que alguien pueda estar orgulloso de algo en lo que no tiene arte ni parte. Sé que estaría igual de orgulloso de haber nacido francés: me emociona escuchar nuestro himno, pero no mucho menos oír La Marsellesa o Fratelli d'Italia. No le doy más vueltas: cuando uno se siete feliz de algo, como yo cuando sigo como un energúmeno un partido de la selección, y no le hace daño a nadie, lo sensato es no ser sensato. Dejar que aflore nuestro lado más irracional y disfrutar un poco. Pero siempre de buen rollete porque sin sentido del humor un patriota se convierte en un nacionalista. Y si esta frase no estaba inventada me la apunto.